Marrakech

Hay un Marrakech que no es el turístico de la Mamounia ni de los hamman de lujo, hay un Marrakech auténtico el del pueblo humilde que vive en las aldeas que sobrevive con muy poco, pero lo poco que tiene lo comparte con toda la generosidad del mundo con aquellos que llegamos, no  de tan lejos en kilometros pero si en forma de vida, y le ofrecemos nuestra amistad, nuestro respeto.
En este segundo viaje que he hecho a Marruecos, de el primero ya han pasado unos cuantos años, he podido comprobar como muchas veces quien menos tiene es quien más comparte y quien menos tiene es quien muchas veces es más feliz,. De nuevo he intentado con la fotografia transmitir lo que he sentido al compartir con esta gente, la familia de Bujo, que vive en una aldea cerca de Marrakesch, y que nos hizo sentir como si fueramos parte de su familia, por unas horas pude comprobar y experimentar como vive una familia humilde marroqui,  sentir su hospitalidad su cariño, espero que haya conseguido transmitir parte de esas sensaciones y lo que me expesaron sus miradas, y su entorno, el entorno de su aldea, vacio de casi todo lo material , la vivencia de ese momento quedará sin duda como un recuerdo entrañable en mi vida y con un sentimiento de agradecimiento y cariño a este pueblo humilde y tremendamente hospitalario.